Elegimos cuidadosamente la sémola de trigo duro procedente de cultivos obtenidos en condiciones ideales, donde además del buen porcentaje de proteínas que contiene, se presta atención a la calidad del gluten. PrimoGrano es el mejor ejemplo de lo mucho que amamos nuestro territorio y a quienes cultivan sus frutos. Es el origen de un proyecto de interacción y sinergia con la zona de Vestina, un área de los Abruzos que no todo el mundo conoce y que cobra vida en el valle del río Tavo, antaño lleno de molinos. Definido por Mamilio como un «pecho que dispensa leche y miel». No hay cereal ni forraje que no crezca allí. Todos los procesos, desde la siembra hasta la cosecha, son supervisados por expertos de la empresa con la colaboración y el control de institutos de investigación nacionales e internacionales.